Tiempo.- Fiolee

Has cambiado.   

Te miro y no puedo ver a la chica que había conocido. Lo único que me muestra que eres tu son tus ojos, tu mirada. Me recuerdan a lo que eras antes.   

No te culpo por cambiar, todos lo hacemos, yo lo he hecho.   

No puedo reconocerte, tu expresión es tan triste, aun cuando sonríes, es como si tu cuerpo te obligara a sonreír, es tan triste mirarte y recordar que eras la persona con la cual era feliz hace tan solo algunos años, alguien especial en mi vida. Eras es tipo de personas que no vuelven a aparecer de nuevo.

Pero regresaste.  
Y eso es lo más importante.

Entiendo que no puedo regresar al pasado, y que nunca seremos los mismos. Tenemos algo que nos atormenta, algo que nos deja dormir, algo que te hace pensar, que te hace llorar y mirar hacia la nada en silencio. Hay cosas que nunca se olvidan.
Nunca.  

Aun después de todo este tiempo espero que no olvides nuestra promesa. Es ahora todo a lo que me sujeto, a una promesa infantil y llena de sueños de dos niños. Que aunque suena algo tonto sigo atesorando esa promesa en mí.    

"Siempre juntos".   

No entiendo tu concepto de "siempre", pero estoy seguro que es muy diferente al mío, porque te fuiste sin decir a donde. Dejando en mi cientos de preguntas sin contestar, y aunque regresaste aun no puedo preguntártelas, creo que después de tanto tiempo no tenían tanta importancia.  

Te pido que no olvides esa promesa.
Solo recuérdala.  

  
-"Siempre juntos"- susurre en tu oído al abrazarte el ultima día que te vi. Aquel día parecía un sueño.  

Un sueño hermoso. Uno que me hubiera gustado repetirlo un millón de veces y vivir en el. Un momento que solo tu y yo recordamos, y espero que así sea siempre.  

Dices que me tomas distinto, creo que ya somos dos. No sé si todo esto ha sido para mejor o para peor, espero que lo primero. Aun que regresaras hay algo en mi que nunca volverá a ser igual.  

Aquel día nublado te llevaste algo de mi. Me lo arrebataste. Me hiciste sentir tan vacío, no es algo que se pueda explicar con palabras, es algo que solamente pasa y solo tu lo entiendes, solo tu puedes sentirlo.
Y eso duele.
Más de lo que creí.   

No es que no me alegre que hayas regresado pero mi vida estaba bien antes de tu regreso, ahora no puedo volver a sacarte de ella. Te necesito, pero tengo miedo de decírtelo. Y no quiero volver a tener miedo, quiero ser fuerte por ti, quiero un nosotros.  

Los días pasan y dices que debes irte, algo en mi enloquece. No puedo controlarlo, y creo que te he hecho daño, y del peor tipo. El que nunca se olvida.  

No te mereces esto, no después de llenar mi vida de momentos hermosos, de ser la persona que me mostraría que en la vida existe algo más. Que hay que vivir con emoción, hay que disfrutar el tiempo, aunque sea corto hay que vivirlo al máximo.   

Vaya que tenias razón.   

Aunque te herí sigues conmigo y no lo entiendo, que es lo que puedes querer de mi. Que puede hacerte aferrarte a alguien que te hace daño. Una pregunta con una simple respuesta. Que todos conocemos y a veces nos da vergüenza admitir.  

 Amor.   

Simplemente amor.  

Y eso fue lo que nos unió, y lo que nos prohíbe volvernos a alejar.   

Gracias por estos dos años juntos, te ama el idiota de tu esposo Marshall.